Os enseño algunas imágenes del pueblo en el que me encuentro. El centro urbano es Velden am Wörthersee, a orillas del lago Wörthersee y del otro lado justo de Klagenfurt. Por supuesto, lo más importante y turístico es el puerto, donde en verano los visitantes se dedican a realizar múltiples deportes acuáticos. También hay un barco turístico que cruza el lago hasta Klagenfurt. A primera hora de la mañana, sin gente alrededor, Velden responde al lema de Carintia de ser el lugar donde uno mejor puede encontrar tranquilidad.

Lo que es la pequeña ciudad en sí, tiene una carretera principal que divide la ciudad en dos, y va desde en enlace a Villach hasta la ciudad de al lado, Pörtschach. En esta calle principal se encuentran todos los servicios más importantes: tiendas, restaurantes y bares bien cuidados; y por supuesto el Casino de Velden, famoso en la región y gran atracción turística. El verde es el principal protagonista de la ciudad, ya que los edificios no son muy altos y salvo la calle principal el resto de la ciudad está formada por edificios bellos y solitarios rodeados de jardines y naturaleza.

 

Después, hay muchos pequeñas aglutinaciones de casas, lo que en España llamaríamos parroquias, alrededor de la ciudad, escondidas entre las montañas, y otros lagos menores, como es el caso de mi zona, Objerjeserz, al lado del lago Wörthersee. Son casas con tejados empinados preparados para las duras nevadas del invierno, mucho trabajo con la madera y jardines cuidados. De hecho, en muchas campan los famosos gnomos de jardín. Todo está tan sumamente cuidado que incluso postes de publicidad de periódicos o letreros con el nombre de la parroquia nos sorprenden con cuidados tiestos floridos. Incluso aunque el pequeño lago Saissersee no sea tan importante, los vecinos no dejan de aprovechar lo que la naturaleza les ofrece para pegarse un buen baño.